El verano va quedando atrás, pero sus efectos sobre la piel y el pelo del perro pueden seguir muy presentes. Es hora de ponerse manos a la obra para devolverle su salud y su belleza.

Si es su caso, no desespere, con la ayuda de productos de higiene y cosmética canina de excelente calidad, el consejo de su peluquero y un poco de constancia recobrará su aspecto natural y se sentirá confortable.
Los efectos más comunes que se producen por la agresión del sol y del agua se evidencian en un pelo reseco, áspero, quebradizo y deteriorado, que tiende a apelmazarse con facilidad, falto de brillo, con poca consistencia o enredado, ya que además durante las merecidas vacaciones se tienden a relajar los hábitos de peinados y cepillados rutinarios que se siguen todo el año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario