Estamos en la época de verano, y a la mayoría nos gusta disfrutar del
sol y de la playa. Pero no debemos olvidarnos del
cuidado de nuestra piel, pues en esta época es cuando más daño puede sufrir.
Para disfrutar de una piel radiante y sana, a continuación daremos unos consejos.
Piel limpia
: La limpieza diaria debe realizarse con productos suaves, que no
alteren el manto ácido de la piel. pero que ayuden a eliminar la grasa y
la suciedad.
Hidratación : Es importante hidratar la piel con acites y cremas hidratantes, ya que el calor reseca la piel.
La ropa : Hay que evitar ropa y calzado con materiales que produzcan hongos, o que puedan producir heridas o alergias.
Prevenir infecciones
: Si por accidente se nos produce una raspadura, herida o quemadura en
la piel, para evitar las infecciones es necesario lavar inmediatamente
la zona con agua. En caso de granos o ampollas es importante no
reventarlos ni tocarlos.
La alimentación : Debe prevalecer el consumo de frutas y verduras, sobre el de carnes.
El sueño
: Es importante dormir las horas necesarias, teniendo en cuenta que las
células recuperan su fuerza y se producen cuando se duerme, lo que
ayuda a mantener la piel en buen estado.
Protección solar : Es recomendable cada vez un mayor factor de protección solar para defender nuestra piel de los rayos ultravioleta.
El sol : Conviene reducir la exposición al sol al mínimo en las horas centrales del día.
El cloro
: Después de haberse expuesto al sol o al agua clorada de una piscina,
es necesario darse una buena ducha para hidratar la piel. Es preferible
usar un jabón de PH normal o escasamente ácido.
Antioxidantes
: Debido a la exposición al sol y a las agresiones provocadas por la
sal y el cloro, es necesario recuperar diariamente la dermis, mediante
productos que contengan antioxidantes.
Hasta
aquí
unos consejos espero os sirva para disfrutar del verano, del
sol y de la playa, cuidando y manteniendo
una piel bella y radiante.